jueves, 17 de abril de 2014

Alfredo Castillo...castillo de naipes

Pocos son los medios nacionales de comunicación –Radio, Prensa escrita  y TV-, que han informado con veracidad sobre los acontecimientos de autodefensa llevados a cabo por civiles ante la evidente incapacidad de los tres niveles del Gobierno, por tanto poco es lo que se sabe con certeza en referencia a esas entidades de incipiente insurgencia.

Hace un par de días, Alfredo Castillo -nombrado por el primer mandatario Peña Nieto, pomposamente como Comisionado Federal para la Seguridad en Michoacán-, se reunió con 32 líderes de las denominadas Autodefensas para acordar, según manifestaron ambas partes, un desarme y legalizar sus actividades como vigilantes de la región michoacana. Como plazo perentorio pusieron el próximo 10 de mayo.

El vocero de los policías civiles, el Dr. José Manuel Mireles, el mismo día de la reunión de marras declaró ante la mejor periodista de México, Carmen Aristegui, que entre otros asuntos, el Gobierno federal aceptó liberar a 20 autodefensas presos, entre ellos a Hipólito Mora, acusado de ser el presunto asesino de unos delincuentes adheridos a grupos criminales que los autodefensas combaten.

Un día después de la declaración de Mireles, el comisionado Castillo desmintió tal afirmación e incluso el propio abogado de Mora, dijo no saber nada al respecto y de ser así su cliente no aceptaría tal beneficio ya que evidenciaría su culpabilidad. No es culpable. No lo es, dijo el abogado.

¿Quién miente?

Alfredo Castillo
Lo que si resultó sospechoso para mucha gente en el país –excepto desde luego para Televisa, Tv Azteca, Excelsior, Reforma y Milenio-, es que al señor Hipólito Mora, una vez que le vieron redaños para enfrentar al Estado, de inmediato le adjudicaron cargos criminales para “calmarlo” y en una acción propia de traidores, en una reunión a la que fue convocado, lo aprehendieron. Al propio Dr. Mireles han tratado de intimidarlo. En el mes de febrero atentaron contra su integridad física en aquél extraño avionetazo.

La fuerza del estado es inobjetablemente, muy poderosa y cuando sus intereses –léase los intereses de los políticos que mangonean al país-, se ven afectados, no dudan ni un ápice en poner en práctica tácticas propias de gente abyecta.

Antes de los conciliábulos entre Castillo y los líderes insurgentes, Mireles dijo claramente que los autodefensas serían la piedra en el zapato de Peña Nieto http://hmpnoticias.blogspot.mx/2014/04/seremos-la-piedra-en-el-zapato-de-pena.html), por esa razón quizás el Gobierno, representado por un Castillo cuya credibilidad es precaria, busca debilitar a las piedras del zapato del Presidente.

Las grandes revoluciones comienzan con pequeños conatos. Ya un estudioso de los temas políticos de México lo declaro: Los autodefensas: incipiente INSURGENCIA SOCIAL.

El comisionado para la “seguridad” en Michoacán, Alfredo Castillo, es un castillo de naipes cuya credibilidad se ha derrumbado…De hecho desde hace años nadie le cree. He dicho.