Marcela
Ojeda/ El Financiero
Entre
sus objetivos, la propuesta de reforma hacendaria plantea la creación de empleos
y apoyar a la economía mediante un esfuerzo contracíclico, pero no se observa
ningún programa de estímulo a la inversión y a la generación de empleo. Al
contrario, varias de las medidas desincentivan ambos aspectos, coincidieron
fiscalistas consultados por El Financiero.
Según
los especialistas, la reforma planteada atenta contra la productividad; inhibe
la entrada del capital extranjero y la permanencia de recursos privados
nacionales.
Ahondó
que un sistema fiscal poco competitivo ocasiona que la inversión no llegue, “y Para Enrique
Ramírez, socio de Ernst&Young, la reforma tampoco generará empleos.
“Por
un lado se hable de una pensión universal y por el otro se castigue la
deducción de las aportaciones a los fondos de pensiones que hacen las empresas,
ya que quienes trabajan para una firma privada, habían fondeado sus pensiones
con este incentivo fiscal que se eliminaría”.
Agregó
que otra razón que evitaría la generación de empleos deriva de la disposición
que sujeta la deducibilidad a que los sueldos de los trabajadores estén
gravados, en tanto se establecen limitantes a lo deducible.
Ramírez
dijo que es muy grave que se limiten los beneficios a las maquiladoras, que han
sido un generador de empleo en el país.
Herbert
Bettinger, fiscalista, dijo que los motores de la economía se dañarán con la
reforma que es restrictiva a la familia, pues no gastará y advirtió que la
limitación de deducción a las personas que más ganan podría generar muchos
amparos.