Por Ventura Cota y Borbón III
“Guaymas de pie”, fue el grito con el que irrumpió el aspirante al Senado, Ernesto Gándara Camou, al transmitir su plática, la cual por cierto y sorprendiendo a muchos, casi en su totalidad la hizo de pie, caminando entre los asistentes, aprovechando que el micrófono era inalámbrico.
El “Borrego” subyugó y convenció al exponer su proyecto “Sonora de pie” que preside y el cual sirve de pretexto para su proselitismo, por cierto muy válido.
Llegué al salón Náutico a las cinco treinta de la tarde y éste lucía con un lleno pletórico. Para las seis quince, hora en que arribó al lugar el protagonista del evento, acompañado por su inseparable amigo Ramón López Meza –serio aspirante a la diputación por el XIII distrito con cabeza en Guaymas-, ya la gente estaba impaciente por escuchar al Cimarrón Gándara.
Miré entre los asistentes a muchos “vivos” y hasta muertos en la política. Por regla general, el suscrito no le gusta ir al encuentro de los políticos, más bien dejo que ellos se acerquen por aquello que no soy muy conocido dentro del periodismo. Por tanto saludé al Bebo Zataráin, a su corifeo el Conde Acedo, al ex contrincante de Susana Corella, Pedro Romano y a otros difuntos más, el cual me impresionó fue Leonardo Débora, a quien creí ya en otro mundo.
Cabe hacer mención -porque fue muy evidente-, que durante el discurso de Ernesto Gándara, éste mencionó cuando menos en diez ocasiones a Ramón López Meza, exaltando su excelente labor dentro de la incipiente carrera política en el municipio. Lo que se interpreta que con ese apoyo, López Meza puede ser un sólido aspirante a una curul en el Congreso local.
En fin, fue un evento en el cual el Borrego demostró el gran carisma que posee y que su sola presencia en cualquier lugar provoca tumultos y muestras de apoyo irrestricto.
Ramón López Meza está cerca de brincar alto.