Por Fernando Villa Escárciga
Alrededor de 10 mil pescadores ribereños “libres” en Sonora son explotados o perseguidos por falta de reconocimiento oficial, por lo que urge su legitimación para que asuman sus d
erechos en el sector, expresó Raúl Sánchez Fourcade.
“La actual situación es caótica, es necesario poner orden y se haga justicia a los verdaderos hombres de mar, que se regule la actividad pesquera y se diseñen esquemas para la preservación de los recursos”, expresó el líder de la Asociación de Pescadores Libres de Sonora.
Sánchez Fourcade, ex presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras ‘Luis Donaldo Colosio’, dijo que ya se emprendió la organización de los hombres de mar no aglutinados en organismos que durante los últimos años sólo han parasitado de apoyos oficiales.
De los diez mil ‘libres’ que se estima laboran en la entidad, unos 3 mil 500 pescadores trabajan en Guaymas y Empalme sin permisos de pesca por lo que deben vender sus productos a bajo precio a “factureros” en las playas, comentó.
Es necesario que la gente defienda sus derechos, que pugne por su legitimidad para trabajar en el mar, expuso, al tiempo que se trabaje en el ordenamiento de un sector que hoy padece la peor crisis económica y productiva en la historia de la entidad.
A poner orden
Más allá de cambios climáticos y de salidas tardías, es necesario recordar que el crustáceo es sobreexplotado por las barcos de altamar que extienden sus labores hasta marzo y abril con la complacencia de la autoridad, señaló.
Cualquier pescador sabe que desde enero y febrero el camarón empieza a enhuevarse, por lo que deben pararse las capturas para no afectar el recurso y provocar desastres en la producción, dijo.
“Entrando el año debemos exigir que pare la flota mayor”, manifestó el líder pesquero cuya lucha fue determinante, hace algunos años, para regularizar ante el Instituto Nacional de la Pesca (INP) el chinchorro de línea utilizado por miles de ribereños sonorenses.
El desplome de las capturas, de hasta un 60 por ciento en relación con el ciclo anterior, provoca incertidumbre económica y mucha pobreza para los hombres de mar y sus familias, abundó.
“Ya basta de simulaciones y de cooperativas ‘fantasmas’ lideradas por oportunistas que se aprovechan del gobierno y traicionan a los ribereños; es hora de demandar justicia para los pescadores libres en Sonora”, dijo.
Durante los últimos años, subrayó, la situación de los pescadores se ha venido agravando debido a que estos organismos fantasmas están arropando al sector que cada día está más desprotegido, ya que para el gobierno federal no existe la categoría de ‘pescadores libres’.
Existen y trabajan
Pero los pescadores libres sí existen, son el verdadero motor económico por su fuerza de trabajo; su desconocimiento por parte del gobierno provoca que sean explotados por pseudos líderes cooperativistas que se dividen dos categorías.
Unas son las cooperativas que tienen permisos para explotar especies marinas pero no tienen pangas ni equipos ni pescadores, sólo se dedican a facturar el producto de los pescadores libres, quedándose con la mayor parte de las ganancias a costa del trabajo ajeno.
“El gobierno y las autoridades de pesca saben de qué hablamos, saben que decimos la verdad pero nadie le quiere entrar a este problema que a todo mundo afecta pues el desorden no es bueno para nadie”, acotó.
Sánchez Fourcade, abundó que otra categoría perniciosa se inscribe por pseudo líderes que tienen dinero y, gracias a sus relaciones políticas, compran equipos, obtienen permisos y registran una cooperativa, por supuesto fantasma, donde ellos son los dueños de todo.
Desde Bahía Kino hasta Huatabampo, pasando por Guaymas y Empalme, abundan los cooperativistas patrones de “pescadores” que en realidad nunca son socios, únicamente de papel, señaló.
Estos mismos líderes han recibido muchísimo dinero del gobierno para beneficio propio, lo que provoca el enojo, el desaliento de los verdaderos pescadores que sí necesitan apoyo, pero al no estar en cooperativas son ninguneados por todo mundo, dijo.
Por lo pronto, alertó, ahora preocupa que alrededor de 7 millones de pesos en apoyos gubernamentales podrían destinarse a los ‘vivales’ de siempre; se trata de dinero que si no sale para el 30 de noviembre se perderá en el presupuesto.
Se dice que hasta una comilona con bebidas a raudales organizaron en Guaymas algunos personajes para festejar que ya tienen esos 7 millones en la bolsa para una Asociación Calamarera, que de ahí saldrá para comprar motores y construir una planta, señaló.
Legalidad y justicia
Eso debe acabarse, las autoridades federales y del estado deben voltear hacia la gente que trabaja, casi el 85 por ciento del sector que sí le entra a la mar y no vive de vender facturas y parasitar a costa del esfuerzo ajeno, expuso.
Por lo anterior, manifestó el líder de la Asociación de Pescadores Libres, inició esta lucha y que la voz de la gente llegue a donde tenga qué llegar: hay que exigir a los tres niveles de gobierno que volteen hacia miles de pescadores que reclaman justicia y presencia legal.
Los pescadores libres están considerados como trabajadores ilegales, ya que al no contar con permisos son perseguidos, detenidos, multados y criminalizados de todas las formas por las autoridades del sector.
“Vamos a desenmascarar a quienes dañan al sector pesquero; exigiremos permisos de pesca para los ‘libres’; reclamaremos los apoyos del gobierno que se desvían a cooperativas fantasmas y vamos a proponer medidas para regular la pesca”, subrayó.
Con la nueva Ley Federal de Pesca, alertó Sánchez Fourcade, miles de pescadores podrían quedar fuera ante el reordenamiento que exige este documento recién aprobado por el Congreso de la Unión.
“Ya estamos sintiendo cómo nos están corriendo de las playas porque no tenemos permisos para pescar; si no ponemos orden se vendrá una inconformidad social que no conviene ni a los pescadores ni al gobierno”, advirtió.
Cuidado de recursos
Aclaró que no se pretenden permisos nuevos ni que se aumente el esfuerzo pesquero: hay muchas cooperativas que sólo usan sus permisos para facturar o para chantajear apoyos que deberían ser para los pescadores libres.
Al mismo tiempo, el líder pesquero consideró de suma importancia velar por la conservación del ambiente marino, las costas y la sustentabilidad de sus recursos naturales, pues de ahí viven miles y miles de familias.
En consecuencia, subrayó, se buscará la forma de obtener apoyos de organizaciones preocupadas por la preservación del ambiente que ya tienen una gran presencia en la zona, como World Wildlife Foundation (WWF) y Conservation Internacional, además de otras organizaciones que podrían colaborar en estos trabajos.
Nada se está inventando, el desarrollo de Sonora debe ir de la mano con lo que marcan los lineamientos del turismo y del sector pesquero, atendiendo los mandatos contemplados en la nueva Ley de Pesca.
Y el dirigente de la Asociación de Pescadores Libres dejó en claro: “Para los tiempos que vienen, hay que quitar los estorbos que enredan el progreso de los pescadores”.

“La actual situación es caótica, es necesario poner orden y se haga justicia a los verdaderos hombres de mar, que se regule la actividad pesquera y se diseñen esquemas para la preservación de los recursos”, expresó el líder de la Asociación de Pescadores Libres de Sonora.
Sánchez Fourcade, ex presidente de la Federación de Cooperativas Pesqueras ‘Luis Donaldo Colosio’, dijo que ya se emprendió la organización de los hombres de mar no aglutinados en organismos que durante los últimos años sólo han parasitado de apoyos oficiales.
De los diez mil ‘libres’ que se estima laboran en la entidad, unos 3 mil 500 pescadores trabajan en Guaymas y Empalme sin permisos de pesca por lo que deben vender sus productos a bajo precio a “factureros” en las playas, comentó.
Es necesario que la gente defienda sus derechos, que pugne por su legitimidad para trabajar en el mar, expuso, al tiempo que se trabaje en el ordenamiento de un sector que hoy padece la peor crisis económica y productiva en la historia de la entidad.
A poner orden
Más allá de cambios climáticos y de salidas tardías, es necesario recordar que el crustáceo es sobreexplotado por las barcos de altamar que extienden sus labores hasta marzo y abril con la complacencia de la autoridad, señaló.
Cualquier pescador sabe que desde enero y febrero el camarón empieza a enhuevarse, por lo que deben pararse las capturas para no afectar el recurso y provocar desastres en la producción, dijo.
“Entrando el año debemos exigir que pare la flota mayor”, manifestó el líder pesquero cuya lucha fue determinante, hace algunos años, para regularizar ante el Instituto Nacional de la Pesca (INP) el chinchorro de línea utilizado por miles de ribereños sonorenses.
El desplome de las capturas, de hasta un 60 por ciento en relación con el ciclo anterior, provoca incertidumbre económica y mucha pobreza para los hombres de mar y sus familias, abundó.
“Ya basta de simulaciones y de cooperativas ‘fantasmas’ lideradas por oportunistas que se aprovechan del gobierno y traicionan a los ribereños; es hora de demandar justicia para los pescadores libres en Sonora”, dijo.
Durante los últimos años, subrayó, la situación de los pescadores se ha venido agravando debido a que estos organismos fantasmas están arropando al sector que cada día está más desprotegido, ya que para el gobierno federal no existe la categoría de ‘pescadores libres’.
Existen y trabajan
Pero los pescadores libres sí existen, son el verdadero motor económico por su fuerza de trabajo; su desconocimiento por parte del gobierno provoca que sean explotados por pseudos líderes cooperativistas que se dividen dos categorías.
Unas son las cooperativas que tienen permisos para explotar especies marinas pero no tienen pangas ni equipos ni pescadores, sólo se dedican a facturar el producto de los pescadores libres, quedándose con la mayor parte de las ganancias a costa del trabajo ajeno.
“El gobierno y las autoridades de pesca saben de qué hablamos, saben que decimos la verdad pero nadie le quiere entrar a este problema que a todo mundo afecta pues el desorden no es bueno para nadie”, acotó.
Sánchez Fourcade, abundó que otra categoría perniciosa se inscribe por pseudo líderes que tienen dinero y, gracias a sus relaciones políticas, compran equipos, obtienen permisos y registran una cooperativa, por supuesto fantasma, donde ellos son los dueños de todo.
Desde Bahía Kino hasta Huatabampo, pasando por Guaymas y Empalme, abundan los cooperativistas patrones de “pescadores” que en realidad nunca son socios, únicamente de papel, señaló.
Estos mismos líderes han recibido muchísimo dinero del gobierno para beneficio propio, lo que provoca el enojo, el desaliento de los verdaderos pescadores que sí necesitan apoyo, pero al no estar en cooperativas son ninguneados por todo mundo, dijo.
Por lo pronto, alertó, ahora preocupa que alrededor de 7 millones de pesos en apoyos gubernamentales podrían destinarse a los ‘vivales’ de siempre; se trata de dinero que si no sale para el 30 de noviembre se perderá en el presupuesto.
Se dice que hasta una comilona con bebidas a raudales organizaron en Guaymas algunos personajes para festejar que ya tienen esos 7 millones en la bolsa para una Asociación Calamarera, que de ahí saldrá para comprar motores y construir una planta, señaló.
Legalidad y justicia
Eso debe acabarse, las autoridades federales y del estado deben voltear hacia la gente que trabaja, casi el 85 por ciento del sector que sí le entra a la mar y no vive de vender facturas y parasitar a costa del esfuerzo ajeno, expuso.
Por lo anterior, manifestó el líder de la Asociación de Pescadores Libres, inició esta lucha y que la voz de la gente llegue a donde tenga qué llegar: hay que exigir a los tres niveles de gobierno que volteen hacia miles de pescadores que reclaman justicia y presencia legal.
Los pescadores libres están considerados como trabajadores ilegales, ya que al no contar con permisos son perseguidos, detenidos, multados y criminalizados de todas las formas por las autoridades del sector.
“Vamos a desenmascarar a quienes dañan al sector pesquero; exigiremos permisos de pesca para los ‘libres’; reclamaremos los apoyos del gobierno que se desvían a cooperativas fantasmas y vamos a proponer medidas para regular la pesca”, subrayó.
Con la nueva Ley Federal de Pesca, alertó Sánchez Fourcade, miles de pescadores podrían quedar fuera ante el reordenamiento que exige este documento recién aprobado por el Congreso de la Unión.
“Ya estamos sintiendo cómo nos están corriendo de las playas porque no tenemos permisos para pescar; si no ponemos orden se vendrá una inconformidad social que no conviene ni a los pescadores ni al gobierno”, advirtió.
Cuidado de recursos
Aclaró que no se pretenden permisos nuevos ni que se aumente el esfuerzo pesquero: hay muchas cooperativas que sólo usan sus permisos para facturar o para chantajear apoyos que deberían ser para los pescadores libres.
Al mismo tiempo, el líder pesquero consideró de suma importancia velar por la conservación del ambiente marino, las costas y la sustentabilidad de sus recursos naturales, pues de ahí viven miles y miles de familias.
En consecuencia, subrayó, se buscará la forma de obtener apoyos de organizaciones preocupadas por la preservación del ambiente que ya tienen una gran presencia en la zona, como World Wildlife Foundation (WWF) y Conservation Internacional, además de otras organizaciones que podrían colaborar en estos trabajos.
Nada se está inventando, el desarrollo de Sonora debe ir de la mano con lo que marcan los lineamientos del turismo y del sector pesquero, atendiendo los mandatos contemplados en la nueva Ley de Pesca.
Y el dirigente de la Asociación de Pescadores Libres dejó en claro: “Para los tiempos que vienen, hay que quitar los estorbos que enredan el progreso de los pescadores”.