Por Ventura Cota y Borbón III
Fray Ivo Toneck |
La opinión
unipersonal de quien haya ideado, escrito y sobre todo AUTORIZADO la nota que aparece hoy en el periódico El Vigía con la cual pretenden denostar
al BENEFACTOR fray Ivo Toneck -–no presunto,
como se maneja de manera tendenciosa en el diario de marras--, es sólo eso: una
opinión que además de tendenciosa, por supuesto nada creíble.
La mayor parte de los
habitantes de Guaymas, Empalme e incluso en muchas parte del estado conocen al
franciscano Ivo Toneck. Todos saben que siempre ha sido un hombre de acción; que
incluso hoy a pesar de su avanzada edad, sigue con afanes de ayudar e
independientemente de cómo sea el tamaño del reto, fray Ivo, nunca ha
claudicado, siempre lo ha superado.
Fray Ivo Toneck llegó
a Guaymas hace poco más de treinta años, y desde su arribo al puerto, el fraile
franciscano se ha dedicado a gestionar y conseguir obras en beneficio
colectivo. Sería ocioso y además innecesario enumerar cada una de ellas. Mucha
de su labor altruista está a la vista y por supuesto también la hay aquella que
no se ve.
Quienes estamos
enterados de la trayectoria del fraile franciscano nos indigna por la forma tan
ruin y abyecta con que pretenden
defenestrarlo. Fray Ivo Toneck lo único “malo” que ha hecho, es procurar el bien
de la comunidad guaymense. Y por fortuna todo quedará en pretensión ya que
puedo asegurar que la mayor parte de los lectores del bodrio en mención
naturalmente jamás creerán tal comentario.
Fray Ivo recomendó a
la señora Leticia Medina para que estuviera como coordinadora de la OSEA
(Orquesta Sinfónica Esperanza Azteca) y al hoy MALAGRADECIDO profesor de música
CARLOS GARCÍA BELTRÁN a quien hizo director de la misma.
Respecto a la salida
de OSEA de Bellas Artes, yo fui testigo personal de una llamada que hizo a fray
Ivo el señor Esteban Moctezuma Barragán, mandamás de la fundación propiedad del
señor Ricardo Salinas Pliego. En esa desafortunada conversación, de modo escueto, sin
previamente enviar un oficio o algo más formal, simplemente le dijo que la
orquesta, en un tiempo próximo, dejaba las instalaciones. Así, sin brindar
explicación alguna.
Y vaya que hubo una
grosería de parte del alto jerarca de TV azteca, ya que ni siquiera agradeció
al franciscano, todo el tiempo que éste estuvo absorbiendo fuertes gastos de la
orquesta de marras, porque a pesar de ostentarse la fundación como tal, lo que se aportaba a dicho proyecto, era casi nulo. Exceptuando el sueldo de los maestros, fray
Ivo pagaba luz, agua, teléfono, mantenimiento de instalaciones, vigilancia y un
largo etcétera. Por ello en lo personal se me hizo muy insensible el
procedimiento para anunciar tal salida. Insisto, decidida de modo unilateral
por parte de Fundación Azteca.
Fray Ivo Toneck,
dolido por tan grande agravio, decidió concretar su anhelo en una nueva
orquesta, misma que tras gestiones muy bien asesoradas, logró que se le
autorizara un importante apoyo y próximamente estará en funciones la agrupación
musical.
Algunos maestros y
alumnos de la OSEA conociendo la calidad de los proyectos del franciscano,
decidieron motu proprio emigrar a la nueva orquesta y eso molestó al director y
a cierto “consejero” de dicho patronato lo que ocasionó la nota que de mala “leche”
se atrevieron a publicar en el periódico de color amarillo.
Carlos García Beltrán escupió al cielo y mordió la mano que le dio de comer. La ingratitud siempre
estará presente en cualquier acto donde haya bien común y éste no iba a ser la
excepción. Lo menos que se podría esperar, es una disculpa del periódico sin
embargo conociendo su trayectoria, no creo que se dé.
He dicho.
Nota de El Vigía: