sábado, 31 de agosto de 2013

Diana la cazadora de choferes

Ventura Cota Borbón
En Ciudad Juárez apareció una vengadora anónima. Ésta -quizás inspirada en aquél legendario personaje de los setentas interpretado por el extinto Charles Bronson-, ya es conocida como Diana la cazadora de choferes.

Según las autoridades (in)competentes del vecino estado chihuahuense, en menos de una semana lleva dos ajusticiamientos en igual número de conductores de camiones públicos urbanos.

A través de un mensaje electrónico enviado a una página de Internet de aquella entidad, la presunta justiciera afirma ser la autora de los asesinatos y en su descargo dijo: “Mis compañeras y yo sufrimos en silencio pero ya no podemos callar más, fuimos víctimas de violencia sexual por choferes que cubrían el turno de noche de las maquilas aquí en Juárez y aunque mucha gente sabe lo que sufrimos nadie nos defiende ni hacen nada por protegernos, por eso yo soy un instrumento que vengará a varias mujeres que al parecer somos débiles para la sociedad pero no lo somos en realidad somos valientes y si no nos respetan nos daremos a respetar por nuestra propia mano, las mujeres juarenses somos fuertes”, concluyó.

Esos episodios en los cuales la sociedad, ante la ineptitud o ante la evidente complicidad de ciertas autoridades, ha empezado a tomar la justicia en sus manos se está convirtiendo en una acción cotidiana y ello debe preocupar y ocupar a quienes son encargados en los hechos de ejercer la justicia.

A esos vengadores anónimos y otros no tan anónimos (las policías comunitarias del sureste del país) no les queda otro camino según puede inferirse, que actuar en consecuencia y no faltará mucho para que lo que hoy puede ocultarse se desborde en una ingobernabilidad que ni el propio Ejército tendrá capacidad de controlar.

El pueblo ya está hasta la madre de tanta impunidad, robos, injusticia, uso discrecional del poder. Está hasta la madre de los políticos falaces, de los empresarios voraces y traidores, de todo lo que significa Gobierno.

No tengo ninguna duda en que en el asunto de la incógnita vengadora de mujeres de Juárez, la autoridad pondrá todas sus fuerzas para tratar de encontrarla y consignarla; sin embargo les ha faltado firmeza para poner fin a tanto feminicidio que por mala ventura se ha extendido a otros estados del país.

Ojalá que Diana, la cazadora de choferes sicalípticos no esté asesinando al azar y se lleve entre las "patas" a gente inocente; que si va a seguir con esa dinámica, que en realidad castre y ejecute en el amplio sentido de la palabra, a esos individuos enfermos y degenerados que son en realidad responsables de tanta muerte de mujeres. Más de uno lo pensará de aquí para adelante.