¿Inserción pagada?

Por Ventura Cota y Borbón III

En un medio de comunicación local, apareció un desplegado, presuntamente pagado por algunos miembros del Partido Revolucionario Institucional empalmense, en el cual de manera absurda y cobarde manifiestan su hartazgo hacia las imposiciones, refiriéndose en concreto a la Dra. Blanca Aurora Camacho Sosa.

Escribo que el desplegado es absurdo y cobarde puesto que aparece sin firma y sólo “empapela” a miembros del PRI de Empalme, por supuesto en caso de no ser ellos los autores..

Con enormes yerros ortográficos (¿No contarán con correctores o cuando menos alguien que revise antes de publicarse? Escribieron resurgue [sic], confunden el verbo haber con una preposición –ha por a-, y rematan escribiendo ocaciones [sic]), en el desplegado de marras, un grupo que se asume –cuando menos en el papel publicado-, como inconforme y harto de que siempre sean los mismos quienes compitan por los puestos de elección pública.

El escrito que se publica, es parco, breve, sin enunciados propositivos o impactantes. Se aprecia que simplemente se quiere “joder” por “joder”.

Platiqué brevemente con el líder del tricolor en Empalme, Roberto Rangel Yta, quien manifestó indignación por el mensaje publicado. "Ignoro quién o quiénes sean los autores y la verdad, no quiero saberlo; es una jugada muy sucia, una "marranada", expresó Rangel Yta.

Roberto Rangel aunque se deslindó absolutamente del asunto, tampoco ha salido en defensa de la compañera de partido, cuando menos, no hasta hoy. 

Por supuesto, existe la posibilidad que el escrito de marras haya sido obra de alguien que le tiene mala “leche” a la dentista, incluso el mismo editor podría ser el autor de tan cobarde denuncia.

Ni modo, a la Dra. Blanca Aurora Camacho Sosa la miran como una rival de peso entre los mismos priístas y la consideran peligrosa para el proyecto se infiere de tendencia misógina, por ello buscan la manera de neutralizarla. Pero muchos empalmenses y guaymenses saben que ella sería una excelente candidata a la diputación local del XIV distrito, por ello los obuses cobardes que desde dentro del mismo partido le lanzan.

No reproduzco el escrito mencionado, porque sería darle juego a quien o quienes no lo merecen o validar la cobardía. ¿Cómo es posible que una frágil damita, como la Dra. Camacho, sea agredida de ese modo tan abyecto? El miedo no anda en burro.