viernes, 10 de febrero de 2012

Incultura y desorden

Por Ventura Cota y Borbón III
Qué tristeza me da sinceramente, cuando leo, sobre todo en las llamadas redes sociales, que quienes participan en ellas, hacen pedazos nuestro idioma castellano, considerado en el mundo, como uno de los más completos, hermosos y difíciles de tener como lengua materna, obvio comparado con otros.

Y no es que quiera presumir de culto, sabio o empapado en conocimientos, sino que en lo personal trato de aplicar la reglamentación que exige tanto la ortología como la ortografía, pero cada día hay más gente, entre los usuarios de las redes de marras –entre ellos “profesionistas” egresados de alguna universidad-, que no saben expresarse, la pésima ortografía los delata y ya ni hablar de la redacción.

La verdad es que da flojera meterse al Twitter, al Facebook u otros medios de relación social. Tampoco cantan mal las rancheras el uso del mal escribir en los mensajes vía Messenger –valga la redundancia-, o por medio del celular.

Hace días una periodista de un canal televisivo de ciudad Obregón, se molestó porque le hice una observación sobre un comentario precisamente en el Facebook, en el cual dejaba sin acentuar gráficamente las palabras MÉRITO y REVÓLVER. Le expliqué que no hacerlo cambiaba drásticamente el significado de la palabra y por consiguiente, de la frase.

La respuesta que me dio francamente me pareció absurda: "Es que en mi Blackberry no hay acentos [sic]". Falso. En el mismo texto sí hay palabras acentuadas como por ejemplo DESPUÉS, entre otras, además yo tengo un teléfono móvil similar y desde luego que podemos hacer uso de acentos.

Ni modo, la incultura nos arropa desde hace mucho tiempo y con eso de que los miembros de la Real Academia de la Lengua Española se reúnen cada diez años para modificar, descartar o añadir palabras, pues es un lapso muy largo para abarcar tanta palabra de nuestro español.

A propósito del término LAPSO, ayer me decía un político un barbarismo o redundancia innecesaria, cuando se refirió a que equis persona tenía un LAPSO DE TIEMPO [sic] ya como dirigente y era urgente cambiarlo.

El RAE en una de sus dos acepciones define la palabra LAPSO de la siguiente manera:
Lapso
2 (Del lat. lapsus, deslizamiento, caída).
1. m. Paso o transcurso.
2. m. Tiempo entre dos límites.
3. m. Caída en una culpa o error.
~ de tiempo.
1. m. lapso (‖ tiempo).