Por Lic. Psic. Alfredo Villalobos Gro.
Actualmente el mobbing y el bullying son dos términos que se usan y se escuchan con frecuencia en especial el acoso escolar o bullying, por las características especiales que tiene y el impacto que tiene en quien se le agrede.
El primero es un problema social en el área laboral o en lugar de trabajo, cuya palabra es de origen inglés que se traduce atacar, agredir del verbo “to mob”; como cuando un hombre o una mujer acosa de manera sexual, psicológica, haciendo uso de la agresividad ya sea pasiva o activa hacia su interlocutor, con actitud hostil de tiempo prolongado.
El sueco Heinz Leymann, fue quien le dio nombre a esta sicopatología, describiéndola en fases o estadios: fase de la seducción, la de conflicto, de acoso moral en el trabajo, en el entorno, la actuación o presencia en la empresa, la marginación y al final la recuperación.
Mobbing, se caracteriza por la presencia de la seducción, detonante importante al no resolverse se presenta un conflicto y que a partir de allí se generará la agresión hacia ella o él, creciendo cada vez, hasta provocar alteraciones de la conducta o psicológicas de quien la sufre, hasta que termina renunciando o bien aceptando las peticiones en algunos de los casos. En mobbing, es un problema social, que normalmente no se denuncia, en especial en nuestro medio, la mayoría de las personas prefieren callarlo y soportar tal agresión.
Por otro lado el bullying, es una amenaza que se da en el ámbito escolar, que ha tomado mayor fuerza por los daños y alteraciones que causa; también es una pala-bra inglesa, que significa intimidación u hostigamiento, en el cual el agresor es un niño/adolescente no en todos los casos, puede a veces ser una niña o bien el grupo de alumnos o pandilla quien acose a otro/a y en algunos de los casos a veces quien está frente al grupo también ocasiona este problema.
Grosso modo, el bullying, es el maltrato verbal o físico acompañado de hos-tigamiento, de una forma continua, llevando a quien lo sufre a tomar decisiones fatales. Dan Olweus, quien ha sido estudioso de esta patología, dice que la víctima se convierte un blanco eterno de agresiones. Los especialistas de la conducta han identificado los tipos de agresiones como son físico, el verbal, el psicológico y el social.
A su vez necesitan es necesario que tenga tres componentes para ser considerado como tal. El primero es la supremacía entre el acosador y la victima; segundo es la agresión intermitente entre uno o varios acosadores niños o niñas, con la intención genuina de causar daño y, la tercera es una actitud totalmente agresiva de una forma continua.
Lectura recomendada: “Mobbing, volviendo a vivir” de María de la Fe Rodríguez, expone cómo salir librado del acoso y del acosador; “El acoso moral: el maltrato psicológico en la vida cotidiana”, por Marie France Hirigoyen, una forma de conocer, identificar y superar los cambios psicológicos que ocasiona; “Bullying: aulas libres del acoso” de Allan L. Beane, permite conocer las opciones para aprender a detectar, cuidarse y orientar a padres, alumnos y maestros; “Acoso escolar”, de Estibaliz Muzas Rubio, enseña como se presenta, a quienes afecta, quién lo produce y quiénes lo permiten de manera pasiva, así como sus forma de resolverlo.
Deseando poder alcanzar mi objetivo que es el de ofrecer información para su mejoramiento personal, como también deseo además que tenga una ¡Feliz Navidad!
