martes, 18 de mayo de 2010

El silencio de Televisa

Por PRETOR
La noche de ayer, durante el programa de noticias que conduce el gachupín mexicanizado y mecanizado, Joaquín López-Dóriga, después de efectuar un "concienzudo" análisis sobre la situación del señor Diego Fernández de Ceballos Ramos, comentó escuetamente que: "... a partir de este momento y hasta sus desenlace, sea cual fuera, Editorial Televisa y sus noticieros optarán por no hacer comentarios sobre el caso Fernández-Ceballos; todo esto con el objeto de no entorpecer investigaciones de la autoridad y por respeto a la familia y a una vida que está en juego (sic)...".

La realidad de todo este embrollo es que hay de fondo otra situación diferente, es decir, es completamente distinto a lo que dice el corrupto periodista.

Cuando mataron a Colosio en marzo de 1994, Televisa apagó sus transmisiones por órdenes del entonces presidente de la Nación, el rata Carlos Salinas de Gortari. También en aquélla ocasión hubo motivos más allá del ejercicio del periodismo.

Televisa al igual que TV Azteca se han caracterizado por guardar sospechosos y cómplices silencios ante asuntos que ellos consideran de seguridad nacional.

El "Jefe Diego" es el hombre más buscado del planeta en estos momentos y por el bien de él de su familiares y amigos, deseamos sinceramente que aparezca con vida o simplemente que aparezca. Pero no creo que sea problema del estado mexicano, en todo caso, cada secuestro, cada desaparición y cada asesinato de algún connnacional debería entonces ser de importancia semejante.

Don Diego Fernández de Ceballos es -o cuando menos debería ser-, un ciudadano común y corriente, en los hechos, mas con ésta búsqueda intensa se evidencia que es un pez gordo que tiene importancia, por las razones que sean, para el jefe del Ejecutivo, Calderón.

Televisa calló porque hay oscuros intereses que así lo la obligan a hacerlo, pero no por las razones que argumenta el señor más mentiroso de la TV.

Buenos y silentes días...