Por Ventura Cota y Borbón III
Se puede apreciar que la famosa “reforma educativa” impuesta por el señor Enrique
Peña Nieto ha sido usada más como una estrategia del Estado para disminuir e
intimidar a docentes que no se alineen a su régimen autoritario, que como herramienta de mejora al nivel educacional.
Es un hecho
que quienes no acaten la resolución unilateral gubernamental, son de inmediato “persuadidos”
por la fuerza para que entiendan que ellos, tienen patente de corso para joder
al detractor.
Primero fueron maestros de la
Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) quienes se
opusieron férreamente a la reforma de marras; sin embargo ha crecido tanto la
inconformidad que hasta los de casa –Sindicato Nacional de Trabajadores de la
Educación (SNTE)-, ya empiezan a morder al “amo”. Cuando veas las barbas de tu
vecino rasurar…
Los casos paradigmáticos
ocurridos el día de antier en diversos municipios de nuestro estado, en los
cuales la represión ejercida por parte de la Gobernadora –vía fuerzas estatales
y hasta federales-, pone en claro que lo que menos importa a EPN es la
educación (él mismo es un mal educado e ignorante), simplemente evidencian los pasos
que aseguran, el Estado desea dar rumbo a la privatización de ésta.
Por lo pronto, quienes han hecho
el examen exigido a los mentores por la Secretaría de Educación Pública (SEP)
para según ella mejorar el nivel del estudiantado, afirman que sólo es una
trampa que es usada como pretexto para
despedir a quienes ya cuentan con determinados años en el servicio docente y
deshacerse de los incómodos.
A pesar de que los examinados han
pedido a la autoridad correspondiente que les dé datos acerca de quiénes
elaboraron los exámenes de marras, de igual manera quiénes son los revisores de
los mismos, la SEP se ha negado rotundamente a proporcionar la información que por
derecho les corresponde saber a los trabajadores de la educación.
Finalmente hay profesor@s que en su evaluación han salido con un promedio muy aceptable, a pesar de ello no se les ha cumplido lo que promete dicha valoración.
Finalmente hay profesor@s que en su evaluación han salido con un promedio muy aceptable, a pesar de ello no se les ha cumplido lo que promete dicha valoración.
Insisten, es un pretexto muy
ramplón el que usa la Federación para deshacerse de quienes le estorban en su
camino a la privatización. El profesor José
Luis Portillo Liera de Guaymas y otros maestros más del estado de Sonora,
son la evidencia más palpable de que el gobierno es malo para fingir y re-bueno
para MENTIR.
He dicho.