Por Ventura Cota y Borbón III
Es el cuestionamiento que se hace una
columnista de la revista Proceso en alusión a la convocatoria lanzada desde
hace un par de semanas con el objeto de boicotear la ceremonia del Grito con
motivo del inicio de la independencia (así, con minúscula, o debería ser
DEPENDENCIA) y que contrario a lo esperado, el Zócalo, la noche de ayer lució lleno…de
acarreados, pero lleno.
No es que las redes sociales hayan perdido #Poder,
lo que pasa es que el Gobierno de @EPN implementó una contraofensiva muy
eficaz, capaz de revertir el impacto que se buscaba; y no le resultó difícil,
sólo desembolsar una millonada para pagar a quienes desearon acudir a la
plancha de la plaza de la Constitución “motu proprio”, motivados por una
cantidad de 200 pesos, traslado y cena.
Las redes sociales cumplieron su cometido,
pero contra la #Corrupción y las tácticas gangsteriles del gobierno peñista,
esta vez no pudieron.
A diferencia de ciudadanos más conscientes de
otros países, en México aún nos falta crecer. Somos un país habitado por enanos
mentales y una cáfila de cobardes agachones –inclúyome entre ellos-, que nos
faltan redaños para poder intentar tan sólo un cambio…
Las redes sociales no fracasaron. Fracasamos nosotros…¡Viva la #Dependencia de México, cabrones!
He dicho.