Alberto Nájar/ BBC Mundo/ Animalpolítico
En México hay 978 mil maestros y otros 39 mil con goce de
sueldo “que nadie sabe en dónde están”
Les llaman “maestros aviadores”. Son cerca de 70.000
profesores de educación básica que cobran su sueldo sin trabajar, o que hacen
tareas distintas a impartir clases.
El dato, revelado en un censo de escuelas realizado por
el gubernamental Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), ha
causado una polémica que no cesa, especialmente ayer 15 de mayo, cuando México
celebra su día de los maestros.
“Es increíble que haya tantos maestros ausentes de las
escuelas y que sigan cobrando, eso nos sorprende”, le dice a BBC Mundo Milagros
Fernández Fernández, presidenta ejecutiva del Instituto de Fomento e
Investigación Educativa (IFIE), una organización privada sin ánimo de lucro.
“Las organizaciones vamos a seguir presionando al
gobierno para que esto no vuelva a ocurrir, que no se pague a un maestro que no
está dando clases”.
Un reclamo que las autoridades atenderán, según ha dicho
el secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffett. “Si la pregunta es
que si pueden quedar fuera de la nómina, la respuesta es sí”.
Muertos
asalariados
De acuerdo con el censo del Inegi en México existen
39.222 profesores a quienes nadie conoce ni se sabe en dónde se encuentran,
pero que su sueldo es cobrado puntualmente cada quince días, el período de pago
usual en el país.
También hay otros 30.695 que se encuentran comisionados
en tareas sindicales, aunque reciben salario como el de los maestros que
atienden a sus alumnos.
Pero no son los únicos que reciben dinero sin impartir
clases. La organización Mexicanos Primero encontró, en el conteo de escuelas,
que más de 114.000 profesores están jubilados, y muchos de ellos incluso ya
fallecieron pero alguien se encarga de cobrar el sueldo.
Esto representa un gasto mayor a 35.000 millones de
pesos, unos US$2.600 millones al año, según cálculos de la organización civil.
Con ese dinero se podría alimentar a 12 millones de estudiantes durante un año
y aplicar 27 programas nacionales de vacunación.
Pero los recursos se desperdician en profesores que no
trabajan, insiste la presidenta del IFIE. “El presupuesto para la educación en
México es muy alto, pero tenemos que hacerlo más eficiente”.