Ventura Cota Borbón
Martín Ariel López Salazar, el Sub Procurador de Control de Procesos de la
Procuraduría General de Justicia del Estado en Sonora hizo un anuncio
que la verdad de las cosas no se sabe si fue con “chanfle” o producto de la
euforia por ser de reciente ingreso en la policía procuradora de “justicia”.
Dijo
el funcionario de marras sentirse muy orgulloso por que 40 policías de la PEI que
en días pasados iniciaron un curso denominado Valores Éticos y Jurídicos con miras a conformar la Policía Ministerial Acreditable terminarán
éste con bastantes conocimientos acerca de cómo tratar a las personas y sobre
todo garantizar la seguridad pública e impartir de modo más justo la justicia [sic].
La
mula no era arisca…
La
realidad es que la inmensa mayoría de los elementos que pertenecen a fuerzas
policíacas, son represores, soberbios, prepotentes, abusivos y eso no es
cuestión de que sean “educados” para ello. Es una sinergia que traemos en los
genes los mexicanos. Cuando nos invisten de poder, la inmadurez nos hace su
presa y actuamos como verdaderos trogloditas. Por tanto por más cursos y fruslerías
que les impartan, todo será igual.
Ni
modo, la experiencia así lo evidencia. Experimentos similares han fracasado
ante el nulo compromiso de aquéllos que en su obligación está salvaguardar la integridad
física de la sociedad, ya que finalmente acaban convirtiéndose en sus verdugos.
Ojalá
que mi inferencia esté equivocada aunque tal parece eso como un gatopardismo que
no falla. Al tiempo, como dice el Tibo.