Ventura Cota Borbón
Hace muchos años en Chihuahua, ante el
hartazgo de la ciudadanía combinado con la impunidad, la corrupción, las
mentiras y otras cosas más que usan los políticos para ascender al poder, salió
la “puntada” de postular a la presidencia municipal de ese estado a un asno. No
es vacilada: un burro, un pollino, un asno, borrico, rucio, jumento, garañón,
onagro, rucho.
En Veracruz, en Xalapa concretamente, la
ciudadanía igualmente ya cansada, harta de los mismos que pretenden las mismas
posiciones, a través de las redes sociales candidatearon a un gato.
Morris es
el félido que ha sido lanzado a la fama por que la gente lo ha aceptado sin condición.
Y lo peor del asunto, es que se ha tomado tan en serio que hasta el IFE
pretende intervenir al lanzar anuncios “conminando” al votante a no
desperdiciar el sufragio en el “candigato”.
Por ejemplo, aunque siempre son roedores los
postulados a puestos de elección popular, la gente, sobre todo los seguidores,
los encumbran para que esas “ratas” –como el César, el Otto, el Memo, Etc-,
tengan la facilidad de robar a pasto abierto.
Y no sólo son gatos, perros o burros los que
buscan ser elegidos, sino que recientemente se “escogió” para alcalde a un “cocodrilo”…¿Adivine
usted que ayuntamiento desgobierna?