Por Juan Pescador
Al margen de la intelectualidad, los enfoques y metodología científica de los estudiosos del Perfil Psicológico del Mexicano; se desató la ironía popular, la “autocrítica” de cualquier “hijo de vecino”, como la nuestra, que no pretende plagiar a los Maestros Octavio Paz, Santiago Ramírez, ni menos al sonorense Óscar Monroy Rivera, por eso entrecomillamos el encabezado de esta nota.
Seguimos con lo mismo, pretendiendo que el amable lector, se interese en la lectura, que es otra, de las pimientas de la vida.
Sería bueno formarnos de una vez en la fila de la superación individual y colectiva, para lograr una Ciudadanía de Excelencia, y no la mediocridad en que reinan los gandayas, los atenidos, los parásitos, los políticos acarrea con todo, los votantes motivados con dádivas, los padres de familia irresponsables, reproduciendo estudiantes de caricatura o violadores de secundaria; los “ninis”; los jorobados de tanta tele; los deportistas por correspondencia, los que quieren adelgazar y siguen tragando; los robacobre, los periqueros y tenderos de “tienditas, los policacos, los “candidatos” madrugadores; los que sin ningún estudio de las artes sueñan con hacerse “artistas famosos”, los que sueñan sacarse la lotería y súmenle, adicionen conductas, que en vez de atenerse al trabajo arduo, a la innovación, a la producción, a la creatividad objetiva; viven en la molicie y en un destino que nada asegura… y, como dijera Chava Flores:
“A qué le tiras cuando sueñas mexicano…”
Enseguida, unos agregados chuscos o “pornográficos” del tema:
¿Cúal es la diferencia entre una banca y un mexicano?
Que la banca puede SOSTENER a toda una familia …y el mexicano enano…? *#%]*°)##>…
Cuáles son las tres mentiras más frecuentes del mexicano enano:
1.- “Mañana te pago”.
2.- “La última y nos vamos” y
.- “Te lo juro mi amor, que nomás la puntita”.
Al mexicano enano le dicen que es el “Futuro del país”, mientras le roban su Presente.
El empresario mexicano enano, no crea tecnología ni invierte, importa maquiladoras.
Otros pregonan “di no a la piratería”, pero no se esmeran en innovar, inventar, abatir costos, tecnificar producción, ser competitivos; producir con calidad; pagar a la mano de obra de acuerdo a su productividad, pagarles las prestaciones de Ley.
El empresario enano finca sus ganancias en transar al fisco, al trabajador, al consumidor. Y si es comerciante, además transa al cliente y al proveedor.
El mexicano enano gobernante no gobierna para hacer un México sustentable, gobierna para atracarlo y cuidando los intereses de quien lo educó en sus universidades de Harvard, Yale, Massachusetts, etc; pero con beca de “la perrada”. Los políticos enanos se dedican a “la tranza”.
El mexicano enano no vota para elegir al mejor servidor público, vota por el más “guapo”. No vota por la mejor opción, vota por quien reparte pescado, “regala” cemento, se candidatea con recursos y salarios públicos y trafica electoralmente con los cursos de belleza y manualidades del DIF, los recursos de desarrollo social y demás “. Son “grilleros” y no convencen, sino que “ tiran choros” y, además, no se lanzan, “¡se avientan!” y algunos hasta se “arrojan” perreando otro “hueso”.
Ahora un poco de folclor enano:
El mexicano enano no se emborracha, dice: me puse una “pedota”, la “cagué”; me “jetié”; “iba como cola de perro, ¡hasta atrás!”; nomás me eché un “periquito”; iba “echo la madre”; …
Saluda gritando: ¡“qué onda Güey”! Si regresa del “otro lado”, llega gritando de calle a calle: “¿jai, brother…?” y arengando a sus hijos: ¡¡¡ Ey you baby, come hear !!!
El mexicano enano, dice: “me di un putazo”; “me cago de la risa”; Él no ama, “faja”y si hace el amor ¿cómo dice...? Si consigue una pareja: “tengo un culito”; si se enamora: “estoy enculado”; si se casó: “¡me colgué!” y si le piden “el gasto”: ¡¡¡Ah, cómo chingas!!!
En el trabajo no producen, “hacen como que trabajan” porque el empresario mediocre “hace como que les paga”. Los patrones enanos no delegan, “mandan” por sus “purititos huevos” y si no los acatan “¡te despido sin un pinche quinto” y “si la haces de pedo te “boletino” "pa que ¡ no vuelvas a agarrar ningún trabajo y te mueras de hambre!”.
El mexicano enano en vez de esforzarse, reza por un milagrito de la virgen de Guadalupe o de San Judas Tadeo; en cualquier proyectito doméstico, dice: “ta cabrón” o “luego lo hago”, o “nomás que termine Laura de todos…, o la Reyna del Pacífico… o las Muñecas de la Mafia y si llega a hacer algo en la casa, por simple que sea, dice que es “bien chingón”.
Y en el anonimato de la muchedumbre, si el equipo nacional anota al extranjero, todo el estadio se desgañita gritando:
¡¡¡ VIVA MÉXICO CABRONES!!!